Los dos mejores equipos de La Liga -con permiso del Atlético de Madrid- se miden las fuerzas en San Sebastián.
A priori debería ser un partido vibrante, de buen fútbol y muy igualado. Los dos llegan de empatar en sus compromisos europeos, y presentan armas parecidas: solidez en defensa, medular de nivel y toque que potencia la asociación, y delantera en una gran forma con jugadores muy versátiles y dinámicos que pueden desbordar en corto o en velocidad.
Atendiendo a los grandes jugadores que hay en los dos bloques y a las buenísimas dinámicas de donostiarras y castellonenses, creo que es muy probable que el partido pueda acabar con un empate a goles.