Sergio González nos recomienda su pronóstico para el partido de la NBA.
Denver Nuggets regresa a casa tras una breve gira por Florida, que resultó muy exitosa para el equipo de Mike Brown: dos victorias en dos partidos. Ahora inician una serie como locales enfrentándose a Philadelphia 76ers, equipo que sigue dependiendo casi exclusivamente de Tyrese Maxey.
Denver Nuggets
Denver Nuggets atraviesa un excelente momento de forma, con 9 victorias en sus últimos 12 partidos. Su ofensiva mejora día a día y ya se encuentra entre las tres mejores de la liga, promediando 120.1 puntos por partido con un impresionante 50.1% de efectividad en tiros (el mejor registro de la NBA). La clave del éxito es, sin duda, Nikola Jokic. El serbio está en plena forma, promediando esta temporada 30 puntos, 13 rebotes y 9.9 asistencias por partido. Además, cuenta con el apoyo de Russell Westbrook, quien ha aportado 15.8 puntos en los últimos 10 partidos. Se espera también el regreso de Jamal Murray para este encuentro; en sus últimos partidos, ha promediado 20.7 puntos con un 49% de efectividad.
Philadelphia 76ers
Philadelphia 76ers enfrenta una situación caótica en Pensilvania, que parece no tener fin. Con Andre Drummond, Joel Embiid, Lauri Markkanen, Caleb y K.J. Martin, McCain, Yabusele y George lesionados, el equipo pierde 89 de los 107 puntos que promedia. Es difícil imaginar quién podrá jugar en estas condiciones. Sin embargo, el problema más grave radica en la ausencia de sus dos pívots, lo que será crucial en la defensa contra Jokic. Si el serbio tiene libertad, desmantelará cualquier intento defensivo, y parece que esto es exactamente lo que le espera a los 76ers.
Denver Nuggets vs Philadelphia 76ers Pronóstico
Una Philadelphia 76ers debilitada ya pierde la esperanza de alcanzar siquiera la zona de Play-in. La falta de motivación es evidente, mientras que Denver Nuggets, liderado por Jokic y con una rotación mucho más amplia, parece preparado para sentenciar el partido con contundencia. Honestamente, no veo cómo los 76ers puedan evitar una derrota abultada.