Iñaki Aval nos recomienda un pronóstico para la Nations League.
La Inglaterra de Gareth Southgate, por mucho que haya estado a una tanda de penaltis de proclamarse campeona de Europa en Wembley, sigue en el ojo del huracán. El estilo de juego no ha dejado de estar nunca en entredicho, en parte, por la gran generación de futbolistas jóvenes (Mason Mount, Bukayo Saka, Phil Foden, Jarrod Bowen, Jack Grealish, Jadon Sancho…) que han irrumpido a lo largo de los últimos años en 3/4 de campo, sumado a otros pesos pesados ofensivos como Harry Kane o Sterling. A nivel cuantitativo, probablemente sea ya junto a Francia la selección a la que se le debería exigir más pegada, pero eso es algo que parece estar lejos de suceder dado el conservadurismo del seleccionador. Esta circunstancia, junto con un rival como la actual Hungría –que se hace fuerte desde el rigor táctico defensivo– no debería augurar un duelo demasiado abierto.
Sin embargo, un partido en Wembley para cerrar la 21/22, podría elevar las exigencias de unos “Three Lions” que solo han marcado un gol en los tres partidos disputados hasta la fecha en esta UEFA Nations League. Y, por otra parte, pesará la sed de venganza tras la victoria (1-0) del combinado húngaro hace una semana, en el Puskás Aréna de Budapest. Viendo el grupo, todo apunta a que, si hay una cita propicia para que Inglaterra se reivindique, será esta 4ª fecha. Pero, también, si hay una selección que se ha erigido como “matagigantes” en el último año, esa es la Hungría de Marco Rossi. Con la disciplina por bandera y mucha pólvora atacando de forma muy directa con Szalai y Sallai como referencias, ya sabe lo que es quitarle puntos a lo largo del último año en partido oficial a la propia Inglaterra y Alemania –ambas en dos ocasiones– o a la Francia de Deschamps. Tras la primera vuelta de esta UEFA Nations League, es segunda de grupo, coincidiendo con ingleses, teutones e italianos; otra proeza más.