Iñaki Aval nos recomienda un pronóstico para la clasificación para el Mundial.
El Perú 0-0 Australia de ayer fue una muestra de lo que supone jugar una repesca rumbo al Mundial. Mucho respeto, mucha cautela e, incluso, miedo a tirar por la borda todo el camino recorrido hasta llegar aquí. Y si bien el estilo de los implicados en dicha primera repesca invitaba a visualizar un duelo cerrado y cocinado a fuego lento, el de la segunda parece que será similar. No tanto por lo que ha mostrado Nueva Zelanda hasta proclamarse campeón del clasificatorio oceánico, siendo allí el rival a batir, sino porque ahora será una Costa Rica acostumbrada a realizar un fútbol bastante simple –de repliegue y contragolpe– quien deba asumir bastante más iniciativa de lo que acostumbra por partir como favorita.
Prueba de la hegemonía neozelandesa en la OFC, los resultados mostrados desde 2010, año mundialista en el que Australia dejó de pertenecer a la confederación de Oceanía (OFC) para unirse a la asiática (AFC). Desde entonces, Nueva Zelanda es el rival a batir y solo ha perdido un encuentro ante selecciones de su misma confederación. Fue contra Nueva Caledonia, 0-2, en el año 2012. Ya ha llovido desde entonces. Y en este camino al Mundial, apenas ha recibido un gol en contra en sus cinco enfrentamientos y ha protagonizado varias goleadas como la mostrada en la final (5-0) frente a Islas Salomón. Costa Rica, por su parte, ha recibido ocho en 14 encuentros, siendo el segundo mejor registro de Centro-Norteamérica tras los siete encajados por Canadá. Ambas se vienen haciendo fuertes desde la defensa y, viendo lo que se juegan, no se espera un partido con demasiados riesgos hasta deshacer un 0-0 inicial donde las dos tendrán algo importante que defender: el hecho fundamental de no ir a remolque, un contexto que no dominan y donde la ansiedad juega un papel crucial.
La Nueva Zelanda liderada por Chris Wood, el delantero centro fichado por el Newcastle a principios de este 2022, busca su tercera fase final de un Mundial; mientras que para el experimentado combinado tico sería la sexta y tercera consecutiva, con los últimos coletazos de aquella generación dorada que alcanzó los cuartos de final en 2014 de la mano de los Keylor Navas, Joel Campbell, Bryan o Celso Borges, que se mantienen como iconos de los dirigidos por Luis Fernando Suárez.