Una mentira repetida mil veces sigue siendo mentira

Gareth Bale ha sido tendencia en la última semana. Da igual si te refieres a nivel de clubes como de selecciones. Siempre está ahí, como ese vecino ruidoso, que diría Sir Alex Ferguson refiriéndose al Manchester City hace años. Una polémica creada hace unos años y que a algunos les interesa que siga latiendo, que siga existiendo. Entonces, acuden al bosque más cercano, recogen los troncos de leña más propensos, más grandes, y vuelven a la estufa, a la hoguera, para echarlos con el único propósito de que las candentes llamas y cenizas nunca se apaguen. El fuego debe seguir, aunque sea verano y no haga falta.

Aburre. Me aburre mucho. Un continuo enjambre de abejas que ya ni siquiera trabajan para producir miel, sino para generar picaduras, heridas mediáticas. Se va. Se queda. Ahora hace un gesto que (para algunos) ofende. Luego sonreirá y dirán que está ofendiendo a la gente, aunque sea mentira. La cuestión es señalar a un Gareth Bale que es una estrella que ya ha demostrado de forma seria que le importa un bledo todo lo que está girando a su alreredor.

La última tontería, la bandera con Gales. "¡Se está riendo!". Y, sí, es indudable. Bale se estaba descojonando vivo cuando apareció la ya famosa bandera. Pero, seamos serios. Él no sacó la bandera y decidió reírse (supuestamente, como dicen) de nadie, ni del madridismo, ni del Real Madrid. Se estaba riendo por la situación, por la trolleada de sus compañeros, que le cazaron y no pudo escapar. Todo ello en mitad de una celebración. Se hablado enormemente de la bandera y no tanto de que celebraban su clasificación para la próxima Eurocopa. Porque sí, porque interesa venderlo así, porque interesa vender que Bale sale con toda su caradura y reta al madridismo. Increíble. Me da hasta vergüenza ajena.

Gareth Bale es un jugador descomunal. Es un futbolista de talla mundial, que ha dado títulos importantisimos al Real Madrid (¡nadie se acuerda ya!) y que está siendo maltratado mediáticamente los últimos años. ¿Se lesiona mucho? Quizás sí. ¿Se muestra frío cuando se espera algo más de cercanía o emociones? También. Pero de ahí a montar todo este circo, de ahí a esparcir toda esta basura, hay un mundo. Un mundo en el que muchas veces no me encuentro al ver cómo se crean mentiras, se fabrican bulos y se alimentan hasta convencer a la opinión popular.

Increíble. Una mentira repetida mil veces sigue siendo mentira, aunque a algunos les cueste de entender. Y algo más. Gareth, por favor, vuelve a Inglaterra.