No hay grises en el perfil zurdo del Chelsea
El Chelsea es uno de los equipos más en forma de la Premier League y del fútbol europeo. Una realidad deportiva incontestable e imponente. Un conjunto que, además, de obtener uno de los porcentajes más altos de victorias podría ser el elegido por muchos usuarios de redes sociales. Sobre todo por lo que ocurre en su banda izquierda.
En redes sociales no existen los grises, los términos intermedios. O un lado, u otro. O blanco, o negro. O noche, o día. O playa, o montaña. Y en el Chelsea está claro: o Marcos Alonso, o Ben Chilwell. No hay escenarios entre ellos.
Evidentemente, siguiendo la lógica, no deberían jugar ambos a la vez. Poder pueden, claro, pero en un contexto de normalidad ambos se desenvuelven en la misma posición y la titularidad de uno supone la suplencia del otro. La clave de este escenario es que las rotaciones al uso no existen, porque sus presencias son más alargadas en el tiempo de lo habitual.
Con Frank Lampard el elegido era Ben Chilwell. No había color. El carril zurdo era el lateral inglés y Marcos Alonso quedó relegado de forma rotunda (y casi alarmante) al banquillo. De hecho, la presencia de Chilwell era tan continuada y regular que el español se planteó (según informaciones desde Reino Unido) su salida del Chelsea.
Sin embargo, el club londinense decidió que Lampard debía dejar el banquillo y llegó Thomas Tüchel. Un cambio para reconducir el rumbo del equipo. Las consecuencias y eventos que se firmaron las semanas siguientes son conocidas (y admiradas) por todos y todas. Entre ellas, el cambio del lateral zurdo.
De repente, Marcos Alonso se convertía en titular indiscutible. Lo jugaba todo. Era el elegido de forma rotunda. ¿Por qué antes lo jugaba todo Ben y luego Marcos? ¿Quedaba señalado el británico? Lo cierto es que fue una decisión que, viendo los resultados, era incontestable.
Sin embargo, pese a que el jugador español ha mantenido su protagonismo en las primeras semanas de curso, el cambio ha vuelto a ocurrir. De nuevo, Ben Chilwell de forma rotunda siendo el dueño y señor de la banda izquierda. ¿La consecuencia? Marcos Alonso, suplente.
De nuevo, sin presencia alguna de grises. O uno, u otro. Lo positivo para el Chelsea es que ambos jugadores rinden a un primerísimo nivel deportivo como clave táctica de Tüchel como a nivel goleador. El rendimiento del titular es incontestable, de forma rotunda. Ya sea el inglés o el español, pero por separado, sin reparto de minutos desde la partida.
Chilwell está firmando una dinámica espectacular, tanto en aportación colectiva con sus apariciones por el costado, en el juego exterior, como en términos ofensivos. Ha recuperado la eficiente versión que le convirtió en el mejor lateral zurdo de Inglaterra en las filas del Leicester y que provocó su posterior fichaje por el Chelsea.
Una vez más, no existen los grises en la banda izquierda de Stamford Bridge.