Ange Postecoglou sigue en su cargo a pesar de que Tottenham volvió a perder de manera merecida en su último encuentro. Ahora reciben al Wolverhampton, que llega tras vencer al Manchester United (2:0) en el Boxing Day.
El entrenador del Tottenham justifica los malos resultados del equipo por las lesiones y la sobrecarga de partidos, argumentando que los jugadores saltan al campo cada tres días, lo cual afecta al rendimiento. Y sí, es cierto: Tottenham tiene ocho jugadores lesionados, y tras el partido contra Nottingham Forest (0:1), se sumó otro central, Radu Dragusin, a la lista de bajas. Además, el lateral derecho Jed Spence, quien no era titular habitual pero estaba jugando debido a las ausencias, estará suspendido por una expulsión en los últimos minutos del partido. En aquel encuentro, el 70% de posesión no sirvió de mucho: Forest castigó con una brillante contra. En ataque, Tottenham apenas generó 10 disparos (2 a puerta) y 1.12 xG, números que no representan gran peligro.
Por su parte, los 'Wolves' con su nuevo entrenador son realmente peligrosos. Han ganado sus últimos dos encuentros por un marcador global de 5:0, y para ello solo necesitaron 15 disparos y 1.97 xG. Entre sus víctimas está el renovado Manchester United, al que Matheus Cunha castigó con un gol directo desde un córner. Aunque ese gol también expone problemas en el rival, incluyendo la expulsión de Bruno Fernandes.
En este partido, es previsible que Tottenham mantenga la posesión, pero su defensa debilitada estará vulnerable a las contras de Wolverhampton. Se encuentran en buena forma y tienen argumentos para evitar perder por más de un gol. Apostar por esto ofrece un valor interesante.