El panorama parece claro como un día soleado en el sureste de España: para ascender directamente a LaLiga, Mirandés debe vencer al colista Cartagena y esperar un tropiezo de Elche. A priori, no hay demasiada intriga.
Esta temporada, Cartagena no ha logrado repetir el milagro del curso pasado. Entonces también cayó al último lugar, pero un cambio de entrenador impulsó al equipo hasta la 14.ª plaza. En este campeonato, el conjunto murciano volvió a cambiar de técnico en septiembre, pero no fue suficiente para abandonar el farolillo rojo. En sus dos últimos partidos en casa logró sendas victorias por 1-0 ante Racing de Santander y Tenerife, pero acumula apenas seis triunfos en toda la temporada.
Si Mirandés no logra el ascenso directo, todos señalará el empate sin goles en la jornada 41 contra un rival directo, Almería, como el gran error. Ese 0-0 en casa le hizo caer del segundo al cuarto puesto. Además, el rendimiento fuera de casa del equipo de Alessio Lisci ha sido irregular: no marcó en cuatro de sus últimas diez salidas, y en cinco de ellas se registró un Menos de 1,5 goles.
El guión apunta a un partido de pocos goles, en gran parte por el estilo del Cartagena, que firmó un Menos de 2,5 goles en ocho de sus últimos diez partidos como local, y un Menos de 1,5 en siete de ellos. No espero una tercera victoria consecutiva del colista, pero tampoco una goleada.