A falta de un par de jornadas para el final, Málaga aseguró su permanencia en Segunda División. Burgos, por su parte, ya se había quedado sin opciones de pelear por el playoff desde la jornada 36 y bajó los brazos.
Para un equipo recién ascendido desde la Primera RFEF, el balance es más que positivo. La tabla está tan apretada en la zona media que la actual 16.ª posición de Málaga podría convertirse en una 12.ª… precisamente la que ahora ocupa Burgos. En las últimas cinco jornadas, el Málaga ha alternado victorias y derrotas, sin empates. Ha ganado tres de esos cinco partidos. También hay un dato interesante: en cuatro de esos encuentros, uno de los dos equipos se quedó sin marcar. En dos ocasiones fue el propio Málaga, pero siempre como visitante.
Burgos ha entrado en una dinámica de desconexión desde que se quedó sin objetivos. En las últimas cinco jornadas solo ha sumado tres puntos, fruto de una victoria en casa ante Córdoba (3:2). Ese tipo de partidos abiertos no son frecuentes en el equipo de Luis Miguel Ramis, y mucho menos cuando juega fuera. De hecho, en las últimas 10 jornadas, las tres veces que el Burgos se quedó sin marcar fueron todas a domicilio.
Burgos sufre para generar peligro lejos de El Plantío, mientras que Málaga se muestra sólido en casa, sobre todo en defensa. Confío en que el equipo andaluz cierre la temporada con un triunfo en La Rosaleda. Y quien quiera arriesgar un poco más, puede apostar por la victoria sin encajar.